«Son veinte países que tienen la misma preocupación que tenemos nosotros con los delitos trasnacionales del crimen organizado y la pesca ilegal», afirmó Jarrín durante la ceremonia, previo al vuelo del avión P3-Orión, dotado de sofisticados equipos de vigilancia.
El ministro recordó que el vuelo de esta aeronave forma parte de un convenio de cooperación en seguridad que Ecuador prevé suscribir con Estados Unidos para ampliar su capacidad de vigilancia y detección de eventuales delitos trasnacionales.
Pero «no solamente para las actividades de crimen organizado trasnacional, particularmente el narcotráfico, sino para todo tipo de acto trasnacional que tenga el delito en sus redes», como la pesca ilegal, subrayó.
Explicó que el convenio que se prevé suscribir con EEUU tendrá una primera etapa con el vuelo del avión P3-Orión, ya que permitirá identificar «los detalles y las especificaciones del control que tiene la Fuerza Aérea y la Fuerza Naval para que una nave extranjera pueda sobrevolar» el territorio nacional.
Jarrín, además, recordó que en días pasados visitó el Comando Sur de Estados Unidos con el objetivo de «ver cuáles son las diferentes inquietudes, necesidades y regulaciones que el Ecuador, como garante de la soberanía nacional, debe establecer en un convenio» de las características que se prevé suscribir.
Ello porque la aeronave de vigilancia aeromarítima, que «vendrá periódicamente, cumpla estrictamente lo que está establecido en las regulaciones».
Además, remarcó que la información que se prevé entregue el avión estadounidense será «de gran utilidad» para el país, por sus características tecnológicas.
Y es que «esta información, según he podido constatar en el Comando Sur, no es únicamente del avión, es de una serie de sistemas de aviones que se componen en el sistema de cooperación de inteligencia integral».
«Es una forma de extender las posibilidades y capacidades de identificar, aplicar la ley y, si es necesario, intervenir» contra el delito, añadió el ministro.
La llegada del avión fue anunciada en una rueda de prensa en Quito, el miércoles, por el viceministro de Defensa, Diego Gómez, quien aclaró que estos primeros vuelos del P3 buscan avanzar en el desarrollo de un convenio de cooperación bilateral con EEUU, que se suscribirá después de las valoraciones preliminares.
La colaboración militar estadounidense con Ecuador ha despertado el recelo de grupos de izquierdas, que temen que el proceso conduzca a la reapertura de la base que ese país llegó a tener hasta 2009 en la ciudad de Manta (oeste).
Sin embargo, rechazando esas conjeturas, Gómez recordó que la Constitución del país prohíbe la instalación de bases militares extranjeras, por lo que es irrelevante plantearse esa posibilidad.
Fuente: EFE