Esta iniciativa -que durará doce meses a partir de ayer 17 de octubre- aportará a la reconstrucción de los daños que dejó el terremoto ocurrido el pasado mes de abril y generará condiciones institucionales y de gestión de políticas públicas para enfrentar eventos similares en el futuro, bajo la asistencia técnica del Sistema Nacional de Información Territorial de Chile (SNIT).
En su intervención, la secretaria de Planificación resaltó la solidaridad del gobierno chileno desde las primeras horas, posteriores al terremoto, e indicó que el protocolo busca profundizar lazos entre las dos naciones. “La información oportuna es fundamental para mejorar el diseño de políticas públicas”, señaló Naranjo.
Por su parte, Víctor Hugo Osorio enfatizó en que esta es una oportunidad para materializar un proyecto conjunto que apunta a la identificación de zonas de riesgo, relocalización y evacuación, para planificar la organización del Estado en los territorios que pueden ser más vulnerables.