La Fiscalía estatal, a cargo del caso, no precisó el número de migrantes secuestrados pero medios locales apuntan a que se trataría de unas 20 personas.
El secuestro fue denunciado por una de las víctimas, un joven hondureño de 23 años, quien logró escapar la madrugada del 21 de agosto y tras caminar por varios kilómetros consiguió el apoyo de algunos ciudadanos que lo ayudaron a reportar el caso ante las autoridades, detalló el fiscal del secuestro Alí Arista.
“Habrían sido engañados por sujetos que les cobraron 15 000 pesos (USD 791) a cada uno por llevarlos de la frontera entre Chiapas y Guatemala al estado de Puebla (centro)”, dijo el funcionario en un video difundido por la Fiscalía.
“Buscaban atravesar territorio mexicano para llegar a Estados Unidos por lo que habrían contactado a unos traficantes o ‘polleros’”, agregó. Los migrantes, provenientes de Guatemala, El Salvador, Honduras y Ecuador, eran trasladados en una camioneta cuando el conductor se desvió de la carretera con dirección a San Cristóbal de las Casas, donde minutos después las víctimas fueron ingresadas a un inmueble, detalló Arista.
El joven hondureño relató que “cuatro sujetos les dijeron que debían proporcionar información de sus familiares (…) para que depositaran diversas cantidades como rescate”, agregó el funcionario.
