Un triunfo en el arranque afirma las sensaciones de un equipo sudamericano que sin ser uno de los grandes candidatos al título admite que tiene armas para soñar en una Copa del Mundo que emule o supere su andar en Sudáfrica-2010, donde alcanzó el cuarto puesto, también con el Maestro Óscar Tabárez como director técnico.
El duelo se disputó en el Ekaterimburg Arena y contará con el arbitraje del holandés Björn Kuipers.