La cifra ha caído respecto al 68 % que hace un año declaraba lo mismo, pero consolida una tendencia: el mayor grado de aceptación de los refugiados en Francia en ocho sondeos comparables en los últimos 13 meses ha sido del 49 %.
La encuesta, elaborada por el instituto demoscópico Ifop, arroja también que el 77 % de los franceses considera que entre los demandantes de asilo que llegan a Europa hay terroristas.
Además, el 73 % cree que acoger refugiados generaría un efecto llamada y el 61 % considera que Francia ya tiene «muchas» personas de origen extranjero, aunque el 53 % entiende como un «deber» de Francia el acoger a quienes huyen de la guerra.
Solo el 29 % dice que Francia dispone de los «medios económicos y financieros» para hacerse cargo de los demandantes de asilo y el 27 % piensa que los migrantes representan una oportunidad para estimular el crecimiento económico de su país anfitrión.
El sondeo, realizado entre los pasados 1 y 3 de marzo sobre una muestra representativa de la población francesa, coincide con la reunión el pasado jueves en Amiens (noreste) del presidente francés, François Hollande, y el primer ministro británico, David Cameron, para tratar sobre inmigración.
Ambos líderes mostraron unidad en la gestión de la presión migratoria y una posición común de firmeza en los controles fronterizos, tras varios días de tensión en los campamentos de Calais, donde se concentran inmigrantes con la esperanza de pasar de forma clandestina desde este puerto francés al Reino Unido.
