Según han informado medios locales, una asistente al bar donde se desarrollaba la fiesta acusó al intérprete de haberla manoseado mientras estaba bebido, acusaciones que pillaron a Gooding en Los Ángeles (California) y que motivaron su regreso a la ciudad.
Gooding Jr. anunció su intención de entregarse a la policía neoyorquina después de desmentir dichas acusaciones, aunque durante el día de ayer jueves su abogado había jugado con la idea de que el actor no se presentaría en comisaría.