De acuerdo con la entidad, se espera que esa reforma «estimule la actividad» y además genere en el mercado estadounidense un incremento de las inversiones como resultado de la «reducción de los impuestos a las corporaciones».
Esta reforma del sistema impositivo era una de las principales promesas de campaña formuladas por el ahora presidente Donald Trump y constituye una de las pocas victorias conseguidas por el mandatario ante el Poder Legislativo.
El FMI también elevó levemente su previsión para el año 2019, de 3,7% a 3,9% con relación a las expectativas que la entidad había divulgado en octubre del año pasado.
En tanto, el FMI mantuvo sin cambios la previsión de crecimiento de 1,9% que había divulgado en octubre para la región de América Latina. Sin embargo, elevó considerablemente sus expectativas para las dos mayores economías de la región, Brasil y México.
La entidad mencionó que México se beneficiará de una fuerte demanda estadounidense y elevó la previsión de 1,9% a 2,3%. En tanto, señaló una «recuperación más firme de Brasil», donde aumentó la expectativa de crecimiento este año de 1,5% a 1,9%.
Además, el FMI señaló que existe un escenario de «mejoras en los precios de commodities y también condiciones más fáciles de financiación en algunos de los países exportadores de materias primas».
La entidad financiera señaló que esas condiciones compensan «las previsiones a la baja para Venezuela», pero no detalló las expectativas del desempeño económico en el país petrolero.