El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, asegura que cuando hay marea alta son 4 los sectores que se inundan en la urbe porque el “drenaje es lento”, sin embargo, con 120 minutos de aguacero intenso quedan bajo el agua no solo zonas urbano-marginales, sino también ciudadelas como Urdesa y la Alborada.

Casas colapsadas e inundaciones en extensos sectores dejó el torrencial aguacero que cayó la noche del martes en Guayaquil.

Una de las moradas que se desplomó está en la cooperativa 14 de Septiembre de Mapasingue Este. La familia que allí reside tuvo que ser evacuada. Ayer, alrededor de las 11:00, en la cooperativa 25 de Junio, manzana 674, a la altura del túnel San Eduardo, se reportó que una vivienda de caña había caído.

El ECU-911 coordinó con el Cuerpo de Bomberos de Guayaquil (BCBG), Policía Nacional y la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR), la ayuda. El suceso no dejó personas heridas ni atrapadas, pero sí a una familia damnificada, por lo que se tramitará la ayuda humanitaria.

Así también, personal de la Policía Nacional, que llegó al punto, colaboró con los afectados con el fin de poner a buen recaudo sus pertenencias. Asimismo, en el bloque 9 de Flor de Bastión, una casa de caña quedó completamente destruida, sin embargo no se registraron víctimas porque los ocupantes, en el momento del incidente, estaban fuera de la estructura.

Carmen Quirumbay, propietaria del inmueble, recibió ayuda por parte del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), sin embargo requiere de más apoyo económico para recuperar los implementos educativos de sus dos hijos, de 8 y 6 años.

Mientras, en las calles Ayacucho y Rumichaca, según reportó la central de emergencias, una pared y el techo de un domicilio cayeron. No hubo personas heridas ni fallecidas. Al lugar acudieron unidades de BCBG, SGR y Policía Nacional. Las cámaras de vigilancia registraron, la noche del martes, anegaciones en varios sectores de Guayaquil y uno de Durán.

Según gráficas subidas a la cuenta de Twitter de la entidad (@ecu911sambo), hubo acumulación de agua en algunos tramos de avenidas como Juan Tanca Marengo, Guillermo Pareja y vía a Daule. Entre los sectores afectados estuvieron Bastión Popular, Urdesa, Mapasingue, Urdenor, Sauces y Alborada. En Urdesa Central, las calles se convirtieron en verdaderas lagunas. Los carros que transitaban, por ejemplo, en las intersecciones de la avenida Las Monjas, formaron olas que llegaron al interior de viviendas y negocios.

En el restaurante-cangrejal ‘7 Mares’ el personal estuvo en apuros y fue necesario mover el mobiliario.

Los clientes que se encontraban en el interior tuvieron problemas para abandonar el establecimiento. A ello se agrega el caos vehicular que se formó desde ese sitio hasta el centro comercial Policentro, de al menos 15 cuadras. Algo parecido se dio en otras zonas de esta misma urbanización.

El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) prevé para el 20 de enero el inicio de precipitaciones de mayor intensidad. La lluvia del martes pasado duró aproximadamente 4 horas y fue suficiente para generar 40 mm de precipitación.