En los últimos dos años, la exigencia de que se mantengan los subsidios a los combustibles ha unificado a decenas de organizaciones sociales que hoy conforman el denominado Parlamento Plurinacional de los Pueblos.
Este colectivo se constituyó con 182 organizaciones bajo el nombre de Parlamento de los Pueblos, Organizaciones, y Colectivos Sociales del Ecuador, después del 13 de octubre de 2019, cuando se puso fin a doce días de un paro nacional en contra del decreto 883 que firmó el expresidente Lenín Moreno, en el que disponía la eliminación de los subsidios.
No obstante, Moreno derogó ese decreto luego del diálogo nacional que mantuvo con los dirigentes del paro, con la mediación de los titulares de las funciones del Estado, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Iglesia católica.
Sus reivindicaciones sociales se plasmaron en un documento en el que se resalta que “los subsidios a los combustibles deben mantenerse hasta que se definan criterios de justicia y equidad para la política económica y tributaria, de tal manera que la carga fiscal sea distribuida de manera equitativa y permita la eliminación de la pobreza real y la desigualdad social”.
Los firmantes fueron Jaime Vargas, que en ese entonces era presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie); Mesías Tatamuez, que también presidía el Frente Unitario de Trabajadores (FUT); Carlos Sucuzhañay, presidente de la Ecuarunari; Eustaquio Tuala, presidente del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine).
Entre otros, Marlon Vargas, presidente de la Confeniae; Javier Aguavil, líder de la Conaice; Nelson Erazo, presidente del Frente Popular.
Ahí se plantean alternativas políticas de derechos sociales, sectoriales, crediticias, monetarias y fiscales para el cumplimiento de los Gobiernos.
Incluso, se exigió a Moreno que se cree una institución pública con representantes de sindicatos, universidades, movimientos sociales, del movimiento indígena para que en un plazo de seis meses elaboren un plan económico integral.
Nelson Erazo, dirigente del Frente Popular, detalló que el Parlamento lo integran más de 158 grupos sociales, y que él, en conjunto con los líderes de la Conaie, Fenocin, Feine, FUT integran el “colectivo unitario”, que se encarga de discutir, analizar y organizar la lucha social, pues su “vigencia tiene más importancia ahora” para contrarrestar las políticas económicas de Lasso.
Para Eustaquio Tuala, presidente de la Feine, este conglomerado “siempre se ha mantenido en unidad” y mientras haya “pobreza, desigualdad, corrupción, nos seguiremos fortaleciendo, porque esta lucha es un patrimonio, no nos van a quitar ni tampoco a humillar”, opinó.
Esta instancia se reactivó el pasado 18 de agosto, cuando el presidente Guillermo Lasso invitó a la Conaie a un primer diálogo que se efectuó el 4 de octubre.
Ahora, con las últimas jornadas de protesta en contra del incremento a los precios de los combustibles, el vocero de la Presidencia de la República, Carlos Jijón, anunció que el mandatario invitó a Leonidas Iza, presidente de la Conaie y a los dirigentes del Parlamento, a conversar el 10 de noviembre a las 17:00 en la Casa Presidencial.
El martes 26 de octubre se realizó la marcha organizada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) y la Unión Nacional de Educadores (UNE) en contra del Gobierno. Los manifestantes salieron pasadas las 16:00 hacia la plaza de Santo Domingo, en el Centro Histórico, cercana al Palacio de Carondelet.
En esa manifestación no estuvieron representantes ni simpatizantes de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), que en cambio sí se movilizaron en otras provincias del país. Las bases de la Conaie bloquearon al menos seis carreteras de la Sierra centro y la Amazonía con llantas quemadas, árboles, palos, piedras gigantes y montículos de tierra para impedir el tránsito, y así manifestaron su inconformidad con el incremento de los precios de las gasolinas extra y eco y del diésel.
Ahora, el actual presidente del FUT, Ángel Sánchez, destaca la unidad de este Parlamento, pero sí cree que el Gobierno debería reformular sus estrategias políticas y convocar a cada organización para que pueda escuchar y dar respuesta a las demandas de cada una.
“El presidente debe escuchar a todos y llegar a consensos e ir dando solución. Pero si nos recibe a todos, no va a tener ni qué resolver porque somos muchos, por eso no entiendo cuál es la pretensión”, cuestionó el dirigente sindical. (I)
Fuente: El Universo – Nota Original: LINK
