Carlos Villamarín, exgerente de proyectos en la Secretaría del Agua y actualmente detenido por el caso Odebrecht, viajó dos veces a Brasil. La primera por pedido del Ministerio de los Sectores Estratégicos y la segunda, durante el Mundial de Fútbol, en junio del 2014.
Walter Solís dirigía entonces esa Secretaría y decidió “regalarle” su paquete de viaje, porque en esas fechas se discutía la Ley de Aguas y él no podía desplazarse al Mundial. Villamarín relató estos detalles a la fiscal Diana Salazar, el 24 de julio del 2017, en su versión libre, voluntaria y sin juramento.
También, aclaró que Solís suscribió el contrato con Odebrecht para la construcción del trasvase Daule-Vinces (Dauvin) el 30 de abril del 2012. Hoy, esa obra es indagada en el proceso penal de asociación ilícita en el que Villamarín es uno de los seis sospechosos.
El contrato 2012-012 detalla que Solís firmó el convenio en representación de Senagua y José Conceição Santos y Ricardo Vieira, como apoderados de la constructora brasileña, por un monto de USD 191 millones. Para hablar de este contrato, la fiscal Salazar ya citó dos veces al exdirector de Senagua, pero él no ha asistido a ningún llamado.
La investigadora lo volvió a convocar para el martes 22 de agosto y pidió apoyo a la Policía para que lo ubiquen y lo trasladen a su despacho.