El pasado 10 de diciembre, el presidente de la República, Daniel Noboa, anunció el fin de los apagones desde este 20 de diciembre, debido a la recuperación de la capacidad instalada, la incorporación de nueva generación eléctrica, la compra de energía a Colombia y la mejora de las condiciones meteorológicas. Mientras tanto, el denominado «apagón industrial» rige hasta el 31 de diciembre para siete empresas: dos mineras, dos acereras y tres cementeras.
“Hoy, la gestión de la crisis eléctrica se expresa en resultados”, dijo la ministra encargada de Energía, Inés Manzano al cumplirse el primer día sin apagones anunciado por el Gobierno. La Ministra también señaló que este viernes llegará una segunda barcaza a Las Esclusas, que duplicará la generación de energía flotante a 200 megavatios.
De acuerdo con el presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Azuay, Diego Morales, si bien los racionamientos para este año llegaron a su fin, el Gobierno debe mantener las medidas a mediano y largo plazo para evitar nuevos apagones en un futuro.
Precisó que, durante este periodo, es fundamental continuar la ejecución del Plan Maestro de Electricidad, debido a que, a inicios del 2025, el país tendrá un incremento de 500 megavatios en la demanda energética como parte del crecimiento natural de la población.
Para Morales, el camino que debe tomar el Gobierno es mantener la implementación de energía térmica para enfrentar una eventual crisis hídrica que impida el funcionamiento correcto de las centrales hidroeléctricas. A esto, debe sumarse el mantenimiento del parque térmico que, para el estiaje de este año, no estuvo disponible para suplir la demanda.
Precisó que, si el Ejecutivo no adopta estas modificaciones y correctivos, la posibilidad de que los apagones regresen «es inminente y alta».
Estado caudales y embalses
De acuerdo con Morales, uno de los factores que aportaron para reducir y suspender los cortes de luz fue el aumento de lluvias en las zonas donde se ubican las centrales de generación hidroeléctrica.
Precisó que anteriormente entraban 5 metros cúbicos de precipitaciones, en comparación de los más de 50 metros cúbicos. Con esto, el embalse de Mazar se ubica por sobre los 2.119 metros sobre el nivel del mar, mientras que Coca Codo Sinclair produce 800 megavatios.
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