Un equipo de investigadores, con el fiscal Carlos Baca a la cabeza, estudia las más de 47 000 hojas que contiene el expediente por presunta asociación ilícita, en el que están imputados el vicepresidente Jorge Glas, su tío Ricardo R. y otros 16 sospechosos.
Después 10 meses de investigación, que inició tras conocerse el informe del Departamento de Justicia de EE.UU., la Fiscalía ahora debe probar que los procesados se asociaron para recibir pagos ilegales de la constructora Odebrecht. La teoría de la Fiscalía se conocerá en una audiencia preparatoria al juicio, que debía iniciar el 16 de octubre del 2017, pero que se postergó por dos acciones interpuestas por Eduardo Franco, abogado de Jorge G., el viernes último.
El proceso de asociación ilícita es uno de los ocho expedientes judiciales que ha activado la Fiscalía desde diciembre. Y, por ahora, esta es la causa judicial más extensa.
En los 470 cuerpos constan más de 60 versiones, movimientos económicos, tributarios, transferencias bancarias, y datos que enviaron 15 países, a través de asistencias penales internacionales, entre otros indicios recopilados. El nombre del Vicepresidente aparece en testimonios, correos electrónicos y documentos oficiales.