La brutal golpiza que recibió un vendedor ambulante de Guayaquil, por parte de dos guardias de seguridad, terminó en discrepancias de decisiones entre la Alcaldía y la fundación que administra el Malecón Simón Bolívar, en el centro de la ciudad.
El hecho ocurrió el pasado 30 de junio, como reconoció la fundación Malecón 2000, y quedó grabado en un video, difundido redes sociales.
En el video se observa cómo dos guardias, pertenecientes a una empresa privada, agreden al vendedor mientras el hombre estaba en el piso.
Además, se escucha a dos mujeres que le suplican a los guardias que dejen ir al comerciante y que no le peguen en la cabeza. “Déjelo que salga. No lo ahorque”, grita una de ellas.
En la tarde de este 9 de julio, la fundación Malecón 2000 informó que se había sancionado con una multa a la empresa de seguridad, “como establece el contrato”.
Pero, casi dos horas después, el Municipio guayaquileño emitió otro comunicado indicando que el “contrato con la empresa de seguridad será rescindido“, aunque no se indicó la fecha.
Además, ambos guardias vinculados al hecho violento fueron separados.
Este pronunciamiento del Municipio concuerda con la postura del alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, quien aseguró que se terminaba “el contrato con la empresa de seguridad de manera unilateral“. “Par de energúmenos e insensibles”, agregó Álvarez en su cuenta de Twitter, en referencia a los guardias.
Y en otro mensaje en la misma red social, el Alcalde señaló que nada justifica el maltrato hacia el vendedor, puesto que “un mal golpe en la cabeza” lo podía matar.
El Malecón 2000 o Simón Bolívar es uno de los lugares turísticos de Guayaquil, y está cercado por rejas y puertas metálicas desde la administración socialcristiana del fallecido exalcalde León Febres-Cordero.
