Si bien se pondrá un tope a los préstamos hipotecarios para viviendas superiores a los $ 150.000, el objetivo es priorizar a sectores de ingresos medios y bajos. La medida rige desde el 4 de febrero.

A pesar de que existirá un tope en el monto para créditos hipotecarios otorgados por el Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess), se prevé beneficiar a un número mayor de afiliados.

Según cifras del Biess, en 2015 otorgó más de $ 1.250 millones en más de 26.000 hipotecarios, de los cuales el 76% fue destinado a bienes inmuebles, cuyo costo fue igual o menor a $ 70.000.

Fuentes de la Gerencia General del Biess consultadas por este diario resaltaron que dentro de su compromiso de impulso a la vivienda social, en abril de 2015 esa institución crediticia de los afiliados disminuyó la tasa de interés de 8,5% a 6% para los préstamos hipotecarios solicitados para vivienda de hasta $ 70.000.

Esta medida -entre otras ventajas- permite la reducción de las cuotas mensuales que debe pagar el afiliado y jubilado, así como la disminución del costo final de la vivienda hipotecada. Ello permite aportar a un mayor cumplimiento del derecho a vivienda digna.

Incluso, para viviendas de hasta $ 40.000, los asegurados con ingresos familiares de hasta 3,5 salarios básicos unificados ($ 1.239) pueden acceder al bono otorgado por el Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi) de entre $ 4.000  y $ 6.000.

A decir de Bernardo Ortega, gerente general encargado del Biess, “esta medida permite la reducción de las cuotas mensuales que debe pagar el afiliado y jubilado, así como la disminución del costo final de la vivienda hipotecada que nos permite aportar a un mayor cumplimiento del derecho a vivienda”.

De 2010 a 2015, es decir en 5 años, el Biess ha otorgado más de $ 5.000 millones en créditos hipotecarios a más de 130.000 familias ecuatorianas.