La víctima estaba junto a Sheinman O., con quien fue detenido en junio pasado en Santa Elena con $100 000 en efectivo y documentos consulares falsos; ellos se hicieron pasar como investigadores criminales de la agencia antidrogas de la Embajada de Estados Unidos en Ecuador.
Según la investigación que lleva Fiscalía, los extranjeros procesados por enriquecimiento ilícito vendían insumos médicos y pruebas de COVID-19 y en sus declaraciones mencionaron a Jacobo Bucaram Pulley, hijo del expresidente Abdalá Bucaram, como uno de los vinculados a ese negocio.
Según el relato, él habría adquirido 21 400 cajas de insumos con un pago en efectivo de $321 600. La transacción se habría realizado en una casa en Kennedy Norte, en Guayaquil, donde esperaba Bucaram junto con unas 15 personas.
En unos días se iba a desarrollar una audiencia en este proceso y ocurrió este atentado, que se suma al ataque que se registró hace cinco días en el que resultaron once reclusos asesinados. Allí también se reportaron 18 heridos, 13 reos y 5 policías.
Uniformados que participaron en el operativo indicaron que los habrían intentado asfixiar y que también utilizaron objetos para atacarlos. Hasta la tarde de ayer, agentes de Criminalística recopilaban indicios en el interior de la Penitenciaría.
El Servicio de Atención a Personas Privadas de Libertad (SNAI) confirmó el fallecimiento del extranjero procesado e indicó que se realizan todas las investigaciones del caso.
Héctor Gabriel Vanegas, abogado del otro extranjero investigado, indicó que su cliente está herido y que está recibiendo los cuidados.
Por su parte, el expresidente Abdalá Bucaram en su cuenta de Twitter confirmó que tuvo contacto con los extranjeros. “A mí me dijo uno de los israelitas que lo querían matar, y me dijo si no eramos nosotros, yo le dije que era el Gobierno para involucrar a mi familia. Que jamás en la vida ese era nuestro proceder, vivimos un terrorismo de Estado… Mi familia está en peligro, en peligro… Ayuda, FF. AA.”, indicó en su cuenta Twitter.
Jacobo Bucaram también dijo en su cuenta que con este crimen intentan vincularlo. “Como jamás han encontrado pruebas en mi contra me ordenan una orden de captura por una vasija de barro, sin una sola prueba. Ahora intentan involucrarme con un asesinato de un estafador internacional en la cárcel”, escribió.
Vanegas lamentó estos atentados en las investigaciones por corrupción en salud. “Esto no puede quedar en la impunidad. Querer hacer justicia puede costar la vida en este país. Los abogados estamos en peligro. Hay una mafia que está dispuesta a todo para que su accionar quede impune”, alertó el defensor a las autoridades.
Nota Original: El Universo – LINK