El hallazgo se produjo el 9 de febrero, en el puerto de Bremerhaven, cuando los mismos trabajadores de la empresa importadora de frutas remarcaron algo extraño en el cargamento y avisaron a las autoridades del puerto que, a la vez, se pusieron en contacto con la aduana de Hamburgo.
Los agentes de aduana, al revisar el cargamento, encontraron varios maletines deportivos en una de las cajas de plátanos que estaban llenos de cocaína.
El valor en el mercado de la cocaína incautada se estima en seis millones de euros.
Según la dirección de Aduanas, Ecuador es actualmente uno de los principales países de donde proviene la cocaína que llega a Alemania.
Las investigaciones en torno al hallazgo están abiertas en busca de responsables.