Una última encuesta de Cedatos, cerrada el pasado sábado y difundida hoy, advierte de que sólo un 23,6 % de sus 1.972 entrevistados aprobó la subida del precio de la «súper» a 2,98 dólares por galón (3,78 litros).
La encuesta, efectuada en cinco ciudades del país y con un margen de error del 3,4 por ciento, señala que hay otras medidas que la población sí las aprueba como el pago de una compensación a los jubilados, que goza del 91,1 por ciento de aprobación.
Un porcentaje similar respalda la venta de unos mil vehículos del Estado y el 82 % de los entrevistados dijo estar de acuerdo con la reducción de siete ministerios dispuesto por el Presidente en su política de austeridad fiscal y de reducción del tamaño del Estado.
En ese campo, un 61,5 % de la muestra de Cedatos aprueba la reducción de 1.500 empleados públicos y la terminación de 42.000 contratos ocasionales en entidades del Estado, aunque ello también ha generado protestas del sector sindical.
En conjunto, dice Cedatos, el 36 % de sus entrevistados aprueba las medidas, el 32,7 % las desaprueba y el 31 % no respondió.
Sobre los efectos de los ajustes, el estudio dice que el 22 % considera que la situación del país mejorará con las medidas, el 42,6 % dice que seguirá igual y el 31,4 % dijo temer que empeorará.
El 33,6 por ciento aseguró que su situación personal y familiar irá a peor, el 44,6 por ciento que no habrá cambios y apenas el 18,5 por ciento que mejorará con las medidas.
En líneas generales, el estudio revela que el 30,7 % de los entrevistados por Cedatos se sienten «entusiasmados, optimistas y esperanzados respecto del futuro del país», el 61,9 % de ellos están «preocupados, frustrados, inciertos y tristes» y para el 4,4 % le es indiferente.
Las preocupaciones que ha generado el paquete de medidas y la posibilidad de que el Gobierno anuncie otros ajustes generó este miércoles una protesta de los sindicatos, que efectuaron una marcha por las calles del centro de Quito.
El Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor central obrera de Ecuador, que organizó la protesta, anunció que esta será una primera medida de presión contra el Gobierno, pues ya prepara una «gran movilización nacional» para el próximo 20 de septiembre.
El presidente en turno del FUT, José Villavicencio, dijo a Efe que las protestas continuarán, aunque no descartó un proceso de diálogo con el Gobierno, si retrocede en políticas que favorecen a los grupos poderosos.
El Gobierno, por su parte, ha justificado las medidas y ha señalado que éstas buscan sostener las finanzas públicas y generar liquidez.
Fuente: EFE