El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que las tormentas más peligrosas afectarán a más de 100.000 kilómetros cuadrados, desde el Río Grande en el sur de Texas a Omaha, Nebraska y los estados de Missouri, Arkansas y Iowa.
Treinta y siete millones de personas viven en las áreas afectadas. Otro sistema separado afectará los estados del este, llevando tormentas, fuertes vientos y granizo a Filadelfia, Baltimore y Washington, aunque en estos lugares no se esperan condiciones severas.
La autoridad escolar en Oklahoma pensaba reunirse este martes para evaluar la situación y determinar si cancelan las clases.