La disposición de reingreso se da luego de que los representantes legales de seis estudiantes solicitaron, mediante una carta dirigida al titular de Educación, un nueva reubicación, luego de que la Subsecretaría de Educación del Distrito Metropolitano de Quito resolviera los recursos de apelación y ratificara la sanción de separación y reubicación impuesta por la Junta Distrital de Conflictos Eloy Alfaro, de conformidad con lo establecido en el artículo 331, literal 3, inciso ii) del Reglamento General a la Ley Orgánica de Educación Intercultural, por los hechos suscitados los días 15 y 16 de febrero de 2016.
La separación que antecede los hechos se dio producto de la comisión de faltas muy graves por parte de los estudiantes, establecidas en el art. 330 del Reglamento General a la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI), como “obstaculizar o interferir el normal desenvolvimiento de las actividades académicas” (art. 330, numeral 4).
Los estudiantes de los colegios recibieron a sus compañeros en los colegios mencionados, luego de que ellos firmaran un Acta de Compromiso en la que manifestaron su voluntad de promover y fomentar una cultura de paz, la convivencia armónica, el respeto a la institución y a la comunidad educativa; también se comprometieron a expresar las diferencias de pensamiento sin afectar los derechos de los demás, y a nunca participar de hechos que afecten el normal desarrollo de actividades escolares y del servicio educativo.
Esta mañana, una delegación de estudiantes del colegio Montúfar acudió al domicilio de Jéssica Solís, la policía agredida durante las violentas protestas, para ofrecer una disculpa pública por la agresión que recibió. Solís aceptó las disculpas de los estudiantes.
