Fujimori escribió en su cuenta de Twitter que fue dado de alta de la clínica Centenario, después de haber sido estabilizado por los problemas de salud que lo aquejaron el fin de semana. Según su médico personal, Alejandro Aguinaga, el exmandatario (1990-2000) sufrió los efectos de un problema estomacal, que provocó su internamiento para ser estabilizado.
Sin embargo, el incidente de salud de Fujimori se presentó después de que el exdirectivo de la empresa brasileña Odebrecht Jorge Barata detalló a fiscales peruanos la supuesta entrega de un millón de dólares para la campaña electoral de su hija Keiko Fujimori en 2011.
La hija mayor del exmandatario es investigada por presunto lavado de activos a raíz de los supuestos aportes indebidos de Odebrecht a sus últimas campañas electorales. Además, el legislador Kenji Fujimori, el hijo menor del exgobernante, renunció al partido liderado por su hermana, Fuerza Popular, tras las declaraciones de Barata.
Hoy, Kenji Fujimori informó que otro legislador renunciante de Fuerza Popular, Luis Yika, se ha incorporado a su grupo parlamentario, y que deja a su hermana con 59 congresistas. El grupo que apoya a Kenji Fujimori permitió que el mandatario peruano, Pedro Pablo Kuczynski, se salvara de la destitución en diciembre pasado por sus vínculos con Odebrecht. Kuczynski otorgó el indulto humanitario al expresidente Fujimori, que cumplía una sentencia de 25 años de cárcel, días después de la sesión de vacancia en el Parlamento.
Ahora, Fujimori escribió en Twitter que no es ajeno «a la sensación de inestabilidad que vive el país», en alusión a nuevos pedidos de vacancia anunciados contra Kuczynski por las asesorías que brindó a Odebrecht. «Lo mejor sería que prime la mesura y una actitud responsable que genere un clima de tranquilidad y reflexión para bien de todos los peruanos», apuntó Fujimori.
El exmandatario está a la expectativa de una resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre el indulto recibido, dado que su sentencia se basó en sonadas matanzas denunciadas ante este tribunal internacional.
Fuente: El Telégrafo
