Las autoridades de la aviación colombiana emitieron este lunes su informe final acerca del accidente aéreo de la compañía LaMia en el que murieron 71 personas, entre ellas la mayoría del plantel del Chapecoense de Brasil.

Infobae

El reporte confirmó que el siniestro se produjo por falta de combustible, tal como se había adelantado.

Además, el informe indica que los pilotos eran conscientes acerca de estas limitaciones de combustibles pero se negaron a recargar en dos ocasiones. También fallaron en reportar esto a las autoridades colombianas.

La investigación además constató que había un exceso de peso en el avión de 500 kilogramos, pero eso no fue determinante en el siniestro.

El vuelo LaMia 2933 volaba de Santa Cruz, Bolivia, a Medellín, Colombia, cuando se estrelló en una montaña cerca de Medellín el 28 de noviembre. Seis personas sobrevivieron: tres futbolistas, una azafata, un técnico de la aerolínea y un periodista brasileño.

No debió haber autorización

Los 10 investigadores colombianos y 13 extranjeros realizaron una detallada reconstrucción audiovisual de los hechos para la investigación sobre accidente y concluyeron que la aeronave no debió ser autorizada para hacer el vuelo desde Bolivia hasta Colombia.

Los investigadores no precisaron quién dio la autorización porque no aparece en el plan de vuelo. La cadena de errores continuó desde antes del despegue.

Además de la negligencia en tierra lo más grave, según los resultados iniciales de la investigación, es que el tiempo de vuelo registrado y el tiempo de autonomía de combustible del avión eran los mismos: 4 horas y 22 minutos. Es decir, habrían calculado llegar a su destino al límite de carga de combustible lo cual está prohibido por las autoridades aeronáuticas internacionales.

El coronel Freddy Bonilla, secretario de seguridad de la Aeronáutica Civil de Colombia, indicó en rueda de prensa que “el piloto inicialmente prevé la posibilidad de ingresar a Leticia o a Bogotá por encontrarse en el límite de combustible. Pero más adelante cambia la decisión y decide irse a la posición de dirección al aeropuerto de Rionegro. Ellos como tal eran conscientes de la limitación y de que el combustible que tenían en ese momento no era el adecuado ni era suficiente”.

Otro factor que pudo haber sido determinante en el fatídico accidente es que no se declaró a tiempo la emergencia. «El piloto dijo: me declaro en emergencia. Y esto es a las 9 y 52 minutos. 6 minutos antes del accidente”, explicó Bonilla.

Uno de los hallazgos más importantes en esta investigación preliminar es que la tripulación del avión de la empresa boliviana LaMia habría ocultado información fundamental, importante a la torre de control de Rionegro en Antioquia, antes de declararse en emergencia. Por ejemplo, que los 4 motores del avión se apagaron por falta de combustible.

«En este punto, la tripulación a las 9 y 57, dos minutos antes del impacto reporta que tiene falla total eléctrica, sin combustible. La falla total eléctrica se da como causa de la no acumulación de energía por falta de los motores. Los motores de la aeronave son las fuentes de la aeronave”, dijo Bonilla. Segundos después ocurrió el fatídico accidente.

Los investigadores estiman que en menos de 6 meses podrán entregar la investigación definitiva que establecerá responsabilidades individuales y las consecuencias económicas y penales para la empresa boliviana.

Error humano

El ministro de Obras Públicas de Bolivia, Milton Claros, dijo la semana pasada que un error humano causó el siniestro: «La primera conclusión es que la responsabilidad directa del accidente la tienen la empresa (LaMia) y el piloto (Miguel Quiroga)», dijo Claros.