El Gobierno argentino oficializó hoy la creación de un sistema electrónico para que los comercios minoristas informen en tiempo real de los precios de venta al público, con el objetivo de controlar la inflación, de la que no hay datos oficiales desde la asunción de Mauricio Macri, hace dos meses.
La resolución con la que nace el Sistema Electrónico de Publicidad de Precios Argentinos (SEPA), publicada hoy en el Boletín Oficial, indica que casi la totalidad de los almacenes, mercados, supermercados e hipermercados -salvo pequeñas y medianas empresas- deberán notificar «en forma diaria» los importes de una lista de productos de consumo masivo que será determinada por el Ejecutivo.
La información estará disponible en una web y en una aplicación de teléfono móvil, una vez la Secretaría de Comercio -inscrita dentro del Ministerio de Producción- termine de implementar el SEPA.
La página contará también con una plataforma informática de colaboración ciudadana en la que los consumidores podrán denunciar inconsistencias.
El incumplimiento de la obligación de comunicar los precios será penado con multas de hasta 5 millones de pesos (unos 335.000 dólares).
El Gobierno adoptó esta medida para tratar de controlar la escalada de precios de los últimos meses, espoleada por las medidas económicas adoptadas por Macri en el comienzo de su mandato, como el fin de las restricciones cambiarias que dieron lugar a una depreciación del peso de en torno al 35 % o el fin de los subsidios al consumo eléctrico, que implicarán aumentos del 600 %.
El Ejecutivo no publica cifras oficiales de inflación desde noviembre pasado, ya que con la asunción de nuevas autoridades se determinó reorganizar el cuestionado Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y diseñar nuevos sistemas de medición.
Se estima que no habrá Índice de Precios al Consumo (IPC) hasta la segunda mitad del año y, mientras tanto, el Gobierno ha instado a tomar como referencia la inflación de Buenos Aires.
El crecimiento de precios en Buenos Aires, en enero pasado, según estas cifras, fue del 4,1 %, casi el doble que el del mismo periodo en 2015.
En la variación interanual, los precios se incrementaron un 29,6 % entre el primer mes de este año y el del pasado.
Distintas asociaciones de consumidores han advertido ya que el SEPA no será suficiente para controlar la escalada de precios, según detallaron medios locales.
Durante el último mandato de Cristina Fernández ya se había propuesto una medida similar, que no llegó a establecerse.
Ante la preocupación general, admitida incluso por el Gobierno, por la escalada inflacionaria, el diputado opositor Sergio Massa, uno de los referentes del peronismo y líder del Frente Renovador (FR), retomará hoy la difusión de un IPC paralelo, elaborado a partir de datos de consultoras privadas, al igual que se hacía durante los últimos años del kirchnerismo.