Alrededor de 450 bomberos, apoyados por dispositivos aéreos que disparaban agua contra las llamas, luchan este viernes contra el incendio que aún no da señales de extinguirse.
La tragedia forestal comenzó el jueves de tarde en Villanueva de Viver, en la provincia valenciana de Castellón. Según la portavoz del gobierno valenciano, Aitana Mas, las personas desalojadas pertenecen a ocho municipios de las regiones de Valencia y Aragón.
“Seguimos pendientes y preocupados del incendio”, que ya ha calcinado 3.000 hectáreas en un perímetro de 30 kilómetros, detalló Mas.
Manolo Nicolás, portavoz de los bomberos, aseguró que se han juntado “los ingredientes perfectos para tener un incendio de estas características”, como vegetación reseca, debido a la inusual escasez de humedad en el ambiente en los últimos meses y una “gran cantidad de combustible” vegetal en los bosques.
Aparte de las altas temperaturas, Manolo Nicolás advirtió del “viento de poniente que se va a ver incrementado en las próximas horas” y que “dificulta la labor de extinción”. (I)
Fuente: El Universo – Nota original: LINK