Pasado el mediodía, el presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció la “movilización irregular” de ciertos grupos militares, en medio de un intento de golpe de Estado.
Soldados y vehículos militares se tomaron la Plaza de Murillo de La Paz, mientras una parte de las tropas irrumpieron en la sede de Gobierno, denominada Palacio Quemado.
Frente a esto, en una primera intervención, Arce aseguró estar listo para frenar cualquier intento golpista que atente contra la democracia.
El levantamiento fue protagonizado por Juan José Zúñiga, excomandante del Ejército de ese país y destituido este martes, quien señaló que, con esto, buscaba el retorno de la democracia.
Luego de estas declaraciones y tras el avance de las fuerzas militares contrarias al Gobierno, el presidente Luis Arce destituyó a la cúpula de las Fuerzas Armadas y tomó juramento de los nuevos altos mandos.
En el evento, Arce hizo un llamado a los soldados a defender la institucionalidad del Estado y evitar violaciones a la Constitución.
De su lado, José Sánchez, nuevo comandante en Jefe del Ejército de Bolivia, ordenó a los militares a regresar a sus unidades y exhortó a Juan José Zúñiga a no permitir que “se derrame sangre” inocente.
Luego del cambio de la cúpula militar boliviana, el general Juan José Zúñiga, quien comandó el intento de Golpe de Estado, se retiró de la Plaza Murillo en un vehículo blindado, mientras el resto de soldados dejaron el sitio.
“Hay que ver cómo sale parado el Gobierno”, tras el intento de Golpe de Estado
De acuerdo con Andrés Guzmán, analista político de Bolivia, la ciudadanía se ha mostrado molesta de tener que enfrentar un nuevo periodo de inestabilidad política.
A esto, se le suma el descontento por el manejo de la política económica que, según la población, ha afectado mayormente a la clase media.
“Hay que ver cómo sale parado el Gobierno”, reflexionó.
Para Guzmán, los argumentos y hechos presentados durante este miércoles, dan cuentas de que el intento de Golpe de Estado fue real. Agregó que, en caso de que Juan José Zúñiga, entre a prisión, esto se fortalecería.
Por otro lado, consideró que las declaraciones de Zúñiga son poco creíbles, al señalar que el presidente Luis Arce le pidió “organizar algo” para aumentar su popularidad.
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