El juez de Distrito, Gonzalo Curiel, emitió el veredicto sobre una solicitud del campus en San Diego, California, con más peticiones que serán consideradas en las próximas semanas.
El caso – una de las dos demandas colectivas de exalumnos de un programa de formación inmobiliaria fundado por el candidato presidencial republicano Donald Trump, en California – irá a juicio en noviembre.
Un mensaje dejado en la campaña presidencial de Trump no fue respondido de inmediato.
El fallo del juez Curiel del viernes es el más reciente episodio de una saga en curso en la que Trump cuestionó la imparcialidad del magistrado por su ascendencia mexicana.
El magnate fue fustigado por demócratas y republicanos después de que se refirió repetidamente sobre Curiel -nacido en Indiana- como un «enemigo» y un «mexicano», mientras criticaba las decisiones del juez en el caso.
La Universidad Trump fue lanzada en 2005 como un seminario de negocios en bienes raíces que se comprometió a enseñar a los estudiantes las técnicas de inversión de Donald Trump.
El negocio, que desapareció efectivamente hace varios años, se enfrenta a tres demandas presentadas por y en nombre de los afiliados insatisfechos, dos demandas colecitivas en California y una demanda presentada por el fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman.
Los demandantes alegan que el programa de Trump usó un estimado de US$ 40 millones, pero estaba inmerso en el fraude y el engaño.
El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos ha defendido la escuela y dijo que las demandas deberían haber sido desechadas.