La actriz Amber Heard ha vuelto a dar de qué hablar debido a que en diciembre de este año volverá a aparecer en la pantalla grande en la secuela de «Aquaman» dando vida a «Mera». Pero, más allá de su papel, la mujer ha mantenido un perfil bajo luego de mediático juicio que protagonizó con su ex esposo Johnny Deep por violencia.
El caso judicial –el cual ganó Deep por 10,3 millones de dólares- le trajo mala reputación a Heard, razón por la cual ha decidido no exponerse a los medios de comunicación. De acuerdo a una investigación publicada por «DailyMail», hace unos meses la actriz dejó California para mudarse a la isla de Mallorca, España, donde se le ha visto paseando por las calles de Costix, el pueblo donde reside, al lado de Oanagh Paige y su pareja, la fotógrafa Bianca Butti.
Según relató un comerciante de Costix, municipio español habitado por aproximadamente 1.270 habitantes, la actriz sale de la mansión multimillonaria que renta sin seguridad ni guardaespaldas, pues se comporta como cualquier otra persona, misma forma en que es tratada, pues externó que en ese poblado ninguna persona se involucra en los asuntos del prójimo. Además, pormenorizó que la actriz tiene un gran dominio del idioma español, el cual habla con tono mexicano y no castellano.
Otro de los datos publicados por el medio británico es que en Costix, Heard no es conocida como tal, sino como Martha Jane Camary o «Calamity Jane», el nombre de una mujer exploradora que pertenece a la historia de Estados Unidos del siglo XIX, pues al parecer tiene todos los deseos de dejar atrás su vida como actriz, luego de todos los ataques que recibió por parte de la opinión pública, cuando se llevaron a cabo los testimonios durante el juicio de difamación.
Y aunque mucho se ha dicho que la actriz se encuentra en banca rota, motivo por el cual no habría podido pagar la cantidad pactada en la demanda, y situación por la que Depp redujo el dinero con el que se le sería remunerado a 2 millones de dólares, aseguran que Amber paga una gran cantidad de dinero por la mansión donde se hospeda, propiedad de la ex política española María Antonia Munar, a tal grado que se especula que esa propiedad ya estaba puesta a la venta, hasta que la actriz solicitó rentarla y fue sacada del mercado.