En el espacio El Gobierno Informa, el presidente Lenín Moreno hizo tres menciones a una posible consulta popular. “Si alguien quisiera obstruir la verdad o poner en riesgo la institucionalidad del país, no dudaré, ni un solo minuto, en acudir a la voluntad y a la voz del pueblo”, advirtió.
Lo dijo mientras hablaba del proceso de lucha contra la corrupción que anunció desde que ocupó el poder, el 24 de mayo. Indicó que no incide ni presiona a las funciones de control, ni para perseguir ni para encubrir a nadie. Pero señaló que los culpables tienen que ser sancionados y que los recursos que fueron obtenidos indebidamente deben ser localizados para que sean devueltos.
Para esto, dijo el Mandatario, “estamos contratando auditorías y empresas de investigación especializadas para evaluar las obras en el sector petrolero, investigar el comercio internacional petrolero, descubrir la probable ruta del dinero y recuperar esos recursos que tanta falta le hacen al país”. El presidente Moreno afirmó que no le asustan las dificultades, porque su fortaleza se basa en dos puntales: “la fuerza de la verdad y la fuerza de la democracia”.
Por eso, agregó que confía en la voluntad del pueblo, e insistió en que “antes de retroceder, preferiré acudir al pueblo para que, en su fuerza, dirima y señale los caminos”. Además, dijo que el mayor respeto a la democracia es acudir “las veces que sean necesarias” a que el pueblo se pronuncie sobre su futuro y sus instituciones. Estas declaraciones del Jefe de Estado se dieron 12 horas antes de que inicie la audiencia de vinculación en contra del vicepresidente, Jorge Glas, por una supuesta asociación ilícita en el caso de corrupción Odebretch.
En las últimas semanas ha habido al menos cinco pedidos de consulta popular planteados ante el Jefe de Estado o el Consejo Nacional Electoral (CNE), por diversos temas, los más recurrentes son la eliminación del Consejo de Participación Ciudadana, de la reelección indefinida, y la modificación del proceso de designación de las autoridades de control.