Una portavoz de esa cartera indicó que las aerolíneas afectadas por la prohibición anunciada este martes por el Ejecutivo de Londres -seis británicas y ocho extranjeras- ya han sido avisadas de que las nuevas reglas se implementarán «en los próximos días y no más tarde del 25 de marzo».
La fuente agregó que los pasajeros que viajen en vuelos directos con dirección al Reino Unido procedentes de Turquía, el Líbano, Jordania, Egipto, Túnez y Arabia Saudí «deberían dirigirse al aeropuerto con la expectativa de que las medidas ya han entrado en vigor».
En una decisión similar a la previamente anunciada por Estados Unidos, el gabinete británico obligará a facturar esos ordenadores, tabletas, libros electrónicos y aquellos dispositivos que sean de mayor tamaño que el de un «smartphone» normal a los pasajeros que procedan de los citados países, de mayoría musulmana.
Según las nuevas disposiciones, esos aparatos no podrán exceder los 16 centímetros de longitud, los 9,3 centímetros de ancho y los 1,5 centímetros de grosor.
Esos dispositivos electrónicos tendrán que ser facturados por los viajeros antes de someterse a los controles de seguridad del aeropuerto, al tiempo que continuarán aplicándose las restricciones habituales que rigen actualmente en cuanto a equipaje de mano.
Las aerolíneas británicas afectadas por las nuevas medidas son British Airways (BA), EasyJet, Jet2.com, Monarch, Thomas Cook y Thomson, mientras que las extranjeras son Turkish Airlines, Pegasus Airways, Atlas-Global Airlines, Middle East Airlines, Egyptair, Royal Jordanian, Tunis Air y Saudia.
De ellas, la compañía de bajo coste EasyJet aplica desde hoy el veto a los aparatos electrónicos en cabina, lo que afectará a sus rutas desde Turquía y Egipto.