El Trolebús se convirtió en el eje principal del sistema público de transporte de la ciudad. Actualmente realiza 263 mil viajes diarios. Cada uno de los articulados moviliza a 9 pasajeros por metro cuadrado, generando un gran malestar por la falta de espacio y largos tiempos de espera. A partir de hoy, el servicio del Trolebús será diferente. Los nuevos 80 biarticulados disminuirán en un 60% los tiempos de espera y trasladarán a 250 personas, 100 más que las antiguas unidades.
Los primeros cinco biarticulados, que se integran al sistema Trolebús, son unidades de última tecnología, más modernas, cómodas y seguras. Además de aumentar la capacidad de traslado, son inclusivas, con espacios adecuados para las personas con discapacidad y asientos preferenciales. Se complementan con las nuevas paradas cuyos accesos tienen rampas, piso podo táctil y puertas universales.
Son unidades más seguras. Cada uno de los biarticulados tiene un sistema de monitoreo. Cuatro cámaras permiten al conductor revisar cada una de las puertas de entrada. Los asientos preferenciales vienen con cinturón de seguridad y sus colores se distinguen de los otros asientos. Los nuevos biarticulados cuentan con cinco puertas de ingreso a lado derecho y cuatro al izquierdo, además de 19 salidas de emergencia.
Otra de las grandes virtudes de esta repotenciación es la modernización. Las nuevas unidades son de última tecnología: pantallas led, paneles informativos, accesos para cargar teléfonos móviles y un circuito de comunicación hacen de estas unidades las más modernas del país. A lo largo de estos buses, pantallas led dan información de la ruta, velocidad o datos importantes para el usuario.
Los ochenta nuevos biarticulados mejoran la calidad del transporte público de la ciudad. Disminuirá de 9 personas por metro cuadrado a 6, logrando llegar a estándares internacionales. También los tiempos de espera serán menores, al menos en un 60%.
Los primeros cinco biarticulados permitirán iniciar un proceso de capacitación, orientado a desarrollar las destrezas de los conductores en diferentes áreas técnicas, sistema de conducción y mecánica. Esta etapa durará alrededor de dos semanas. Las demás unidades llegarán a la ciudad paulatinamente y se irán integrando al sistema de transporte Trolebús.
De esta forma, el Municipio de Quito mejora la movilidad del transporte público de la ciudad. Este proyecto se complementa con la extensión de la Ecovía hacia Guamaní, los Quito Cables en el sur y en el norte, BiciQuito y sus unidades eléctricas y el Metro de Quito como su columna vertebral.
