Cientos de aficionados llegaron desde las 13:00 al Estadio Atahualpa de Quito. El partido de octavos de final de la Copa Libertadores de América, entre el ecuatoriano Independiente del Valle y el argentino River Plate los esperaba. Con ansias entraban al campo de fútbol pero antes, dejaban su enlatado, agua o cualquier donación para Manabí y Esmeraldas; atendiendo el llamado del alcalde Mauricio Rodas.

Bajo la coordinación del Municipio de Quito, en cada ingreso del escenario, voluntarios y personal de Policía Metropolitana y Bomberos recibían las donaciones de los aficionados  y las colocaban en fundas. Bolsas que eran apiladas y poco a poco iban llenando las volquetas que llevarían estas donaciones hasta el centro de acopio y embalaje del parque Bicentenario, como parte de la campaña ‘Soy quiteño, soy solidario’.
Más de 20 toneladas con ayuda humanitaria fueron recaudadas este jueves previo al partido. Fue necesaria el apoyo de volquetas y camiones para transportar estos donativos que inmediatamente fueron incorporados a los kits. Los mismos que se transportan a más de 155 poblados en la costa del Ecuador.
Jorge Bartelachi, un joven de 21 años quien viajó desde Latacunga para ver al Independiente del Valle, no llegó con las manos vacías. Él trajo agua y un enlatado “Como dice la campaña ‘Soy quiteño, soy Solidario’, es un gusto unirme a esta iniciativa y ayudar a reconstruir Pedernales y otras ciudades que se afectaron con el terremoto. Pido que todos continuemos ayudando”, dijo.
El periodista deportivo, José Granizo, indicó que “hemos pagado nuestra entrada y también hemos entregado el aporte de  agua y enlatados que pidió el señor Alcalde. Toda la taquilla será para ayudar y estos alimentos para nuestros hermanos de la Costa. La generosidad de los quiteños no cesará.”