La Cámara de Comercio de Quito realizó un estudio de estas cifras. Para su presidente ejecutivo, Patricio Alarcón, el aumento de empresas disueltas se debe a la recesión económica.
“La economía no va bien, el consumo no está permitiendo que las empresas vendan más, es un año de crisis”, aseguró Alarcón.
Por su parte, el ministro de Industrias, Santiago León afirmó que una empresa disuelta no significa que haya quebrado o cerrado. Añadió que la disolución es un acto administrativo que se pudo presentar hace muchos años atrás.