Daniela Chacón, vicealcaldesa de Quito, informó que de acuerdo con la Secretaría de Ambiente del Municipio de Quito, la huella de carbono de la capital es de 5,1 millones de toneladas de dióxido de carbono, siendo el sector del transporte el responsable del 56% de estas emisiones. Quito, además, está por encima del promedio de otras ciudades a nivel nacional.
Chacón dijo que como ciudad se puede hacer una serie de esfuerzos para reducir la contaminación ambiental, por ejemplo, las revisiones periódicas y espontáneas en los vehículos para ver si cumplen las normas. Sin embargo, Chacón es clara: “mientras la calidad de la gasolina no mejore, la calidad del diésel no mejore, no vamos a hacer un cambio sustancial en la contaminación”, precisó.
Insistió en que el 56% de las emisiones provienen de los vehículos y es en la política de hidrocarburos donde está el asunto medular para lograr cambios reales y sustanciales.
Además hizo un llamado para que los ciudadanos alcen su voz para exigir a los candidatos propuestas serias para enfrentar el cambio climático y fortalecer a los gobiernos locales en su accionar.