«Creo que no es ningún secreto decir que llegué muy justo a los Juegos Olímpicos y el objetivo era ganar una medalla para España. Sin embargo esta recuperación me ha causado dolor en todos los torneos desde entonces y ahora me veo obligado a parar y pensar ya en 2017», afirmó en un comunicado. «Siento mucho no poder jugar en Basilea la semana que viene dado que tengo muy buen recuerdo del torneo y la final con Federer en 2015.
Tampoco podré estar en el torneo de París-Bercy y donde siempre me han acogido con tanto cariño. Ahora toca una vez más descansar y empezar a preparar de manera intensa la temporada de 2017″, añadió. Nadal, de 30 años, ha visto su temporada marcada por las lesiones. Por segundo año consecutivo ha terminado sin añadir ningún torneo del Grand Slam a su brillante palmarés.
Una lesión de muñeca le obligó a abandonar en Roland Garros, el torneo que le ha dado sus mayores alegrías, antes de la tercera ronda, que iba a disputar contra su compatriota Marcel Granollers.
Poco después renunció a participar en Wimbledon y se centró en una recuperación contrarreloj para estar lo mejor posible en los Juegos Olímpicos de Rio.
Allí pudo colgarse una medalla de oro en dobles masculinos, haciendo pareja con Marc López, pero quedó fuera del podio en la prueba individual, después de perder ante el argentino Juan Martín Del Potro en las semifinales y luego contra el japonés Kei Nishikori en el partido por el tercer metal.