Por su parte, el equipo del presidente electo Donald Trump ha anunciado que desde el primer día emitirá órdenes ejecutivas para limitar la ley para luego, via Congreso, abolirla.
Obama propuso empezar a referirse al nuevo plan del partido republicano como «Trumpcare».
La sugerencia fue una clara indicación de que el objetivo del Partido Demócrata debe cambiarles la jugada a los republicanos, quienes ya enfrentan presión para redactar un borrador de un proyecto de ley que reemplace Obamacare.
Obama dijo que su mensaje al partido fue: «Cuiden al pueblo estadounidense».
Por su parte, la líder de la minoría demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, declaró que la atención sanitaria «es un derecho, no un privilegio», y que Obama les preguntó hoy si están «listos» para pelear en el Congreso por Obamacare.
En tanto, el presidente electo Mike Pence visitó a los congresistas republicanos y dijo que Trump ya tiene listo su lapicero para hacer cambios importantes a Obamacare a través de decretos.
Demócratas al contragolpe
Los legisladores demócratas están planeando una guerra de relaciones públicas durante el mes de enero, acusando a los republicanos de posiblemente poner en peligro la coberturas de salud de millones de estadounidenses.
El senador Joe Manchin, un demócrata moderado de Virginia Occidental, advirtió que este enfoque de derogar y retrasar podría resultar en un escenario «caótico».
«Voy a advertirlo otra vez, amigos míos: no deroguen esto a menos que haya un grupo bipartidista», dijo Manchin. «Y si no tienen nada para reemplazarlo, no propongan la derogatoria».
Pelosi, dijo en una llamada este lunes que la estrategia republicana de «derogar y retrasar» equivale a «un acto de cobardía», y advirtió que los demócratas no ayudarán a sus colegas en reemplazar el Acta de Cuidado Asequible.
«Es como si fueras a una tienda de porcelanas y rompes una. Tú la tienes que pagar», dijo Pelosi.
La senadora demócrata Dianne Feinstein le dijo a CNN este martes que está en el proceso de elaborar contra mensajes sobre el Obamacare con este lema: «Mira lo que esto le va a hacer a la gente».
«Esto es lo importante», aseguró. «¿Cuánta gente va a perder su asistencia sanitaria?».
Los republicanos están nerviosos por la derogación de Obamacare
Los republicanos apenas están comenzado a vivir su tan esperado sueño de desmontar el Obamacare, y hay temores de que las cosas se estén moviendo demasiado rápido.
Algunos republicanos están advirtiendo no desmontar el Acta de Cuidado Asequible tan rápidamente y urgen al partido a sacar el pie del acelerador. ¿La razón? No hay un plan sobre cómo reemplazar lo que van a derogar. Y aunque los legisladores del partido republicano están ansiosos de complacer a su base con titulares acerca de la eliminación del Obamacare, no quieren ser culpados de dejar a la gente sin seguro médico y con un caos en el mercado de asistencia sanitaria.
El senador John McCain les dijo a periodistas que él personalmente apoya una lenta aproximación a la derogatoria de la ley, diciendo que «siempre» está «preocupado acerca de algo que tomó mucho tiempo en estructurar y tenemos que concentrar nuestros esfuerzos en asegurarnos en hacer lo correcto para que nadie se quede por fuera».
Newt Gingrich, expresidente de la Cámara de Representantes y aliado muy cercano al presidente electo Donald Trump, le dijo a CNN que el gran riesgo para los republicanos es que sean culpados de dejar a la gente sin una cobertura de salud.
«El primer asunto que los republicanos tienen que evitar es ponerse a sí mismos en una posición en la que los demócratas puedan asustar a la gente, con algo así como que no podrán acceder a los servicios de salud por causa de los republicanos», añadió Gingrich.
El mismo Gingrich destacó que antes de que los republicanos envíen un proyecto de ley al escritorio de Trump derogando el Obamacare, el partido debe hacer progresos reales en un plan de reemplazo. «Tienen que tener puentes para darle a la gente una sensación de alivio de que no van a ser abandonados», aseguró.