«Este escándalo del cólera fue creado por el hombre, por las partes en conflicto y por aquellos que, fuera de las fronteras de Yemen, apoyan y perpetúan la guerra y el miedo», dijo O’Brien al Consejo de Seguridad de la ONU.
La crisis humanitaria es «el resultado directo del conflicto y de las graves violaciones del derecho internacional», agregó.
Más de 320.000 casos sospechosos de cólera han sido reportados y al menos 1.740 personas han fallecido, de acuerdo con O’Brien.
Ismail Uld Sheij Ahmed, enviado de la ONU a Yemen, describió la crisis humanitaria como «horrorosa», diciendo que en el país no existe «una sola emergencia sino varias y complejas emergencias».
Más de 7 millones de personas están amenazadas de morir de hambre, entre ellas 2,3 millones de niños malnutridos de menos de cinco años. Yemen es uno de los países árabes más pobres.
Su sistema de salud colapsó tras más de dos años de guerra entre fuerzas progubernamentales apoyadas por una coalición liderada por Arabia Saudí, y rebeldes chiitas hutíes, apoyados por Irán.
O’Brien pidió 250 millones de dólares para atender la crisis provocada por el cólera, y a este punto solo se han recibido 47 millones.
También instó a los miembros del Consejo de Seguridad a que se tomen las medidas para asegurarse de que los funcionarios de salud reciban sus pagos y las instalaciones sanitarias vuelvan a abrir sus puertas.
También habló de la necesidad de asegurar dos rutas para que la comida pueda entrar al país.
Fuente: El Telégrafo