«En medio de este clima de incertidumbre por desconocerse las razones de peso por las cuales la delegación de la OEA abandonó el país, el PLC se pregunta: ¿Se ha ido por la borda el proceso de observación electoral?», inquirió ese colectivo en un pronunciamiento público.
«¿Ya no debemos esperar la importante, necesaria e impostergable participación de la OEA en el delicado proceso que se había propuesto ejecutar?», continuó.
Una misión de la OEA, que visitó la semana pasada Nicaragua con el fin de preparar las elecciones municipales de noviembre próximo, canceló sus encuentros con partidos opositores y organismos cívicos, por «motivos de fuerza mayor, ajenos a la misión».
La misión de la OEA, liderada por Gonzalo Koncke, jefe de gabinete del secretario general del ente, Luis Almagro, no ha emitido ninguna declaración pública al respecto.
La OEA tiene previsto desplegar en Nicaragua una misión de 120 observadores para los comicios municipales del 5 de noviembre próximo, según el director del departamento de cooperación electoral, Gerardo de Icaza.
La misión liderada por Koncke solo se reunió la semana pasada con autoridades del Gobierno y con el cuerpo diplomático acreditado en este país.
El pasado 28 de febrero, la OEA acordó con Nicaragua vigilar las elecciones municipales de noviembre próximo.
Además, acordaron que la OEA brindará apoyo técnico para el fortalecimiento en materia de registro, cedulación y depuración del padrón electoral.
Las partes también convinieron fortalecer jurídicamente la aplicación de la norma sobre el «transfuguismo político», que ocurre cuando un diputado abandona el grupo parlamentario por el cual fue electo.
El memorando fue suscrito después de las controvertidas elecciones generales de Nicaragua de noviembre pasado, en las que el presidente Daniel Ortega se reeligió por cuarta vez y fue excluido el principal bloque opositor.
En las elecciones del 5 de noviembre se elegirán a los alcaldes, vicealcaldes y concejales de los 153 municipios de Nicaragua.
Fuente: EFE