Una disputa se desató el miércoles 7 de junio del 2017 por la conducción temporal de la Contraloría General del Estado. Sabett Chamoun y Pablo Celi se atribuían el cargo de contralor subrogante, en medio de la intervención de la Fiscalía y de la Policía. La pugna surgió a partir de una decisión del contralor Carlos Pólit, quien dispuso que el viernes 2 de junio le notificaran a Celi que debía dejar el cargo de subcontralor general.
La acción de personal incluía que Celi también debía dejar de subrogar las funciones de Pólit. A partir del mediodía circuló un video grabado el viernes 2 de junio, en el que aparecen Chamoun, Ligia Cobo, coordinadora de Talento Humano, y Adrián Bustos, secretario general, en el momento en que notificaban a Celi el cese de funciones por remoción.
Molesto, él se niega a firmar el documento y lo rompe. Antes de salir de la oficina, reclama y luego empuja a Bustos. A pesar de recibir esa notificación, Celi continuó trabajando e incluso el martes asistió a una reunión convocada por el presidente Lenín Moreno, en la que participaron también otras autoridades de control, para hablar sobre la estrategia anticorrupción que impulsa el Ejecutivo desde el lunes.
Por eso, el miércoles también fue a laborar con aparente normalidad. Pero a primeras horas de la tarde, Chamoun llegó al edificio con un grupo de policías, para posesionarse en el cargo delegado por Pólit. Ella incluso ofreció en la tarde una rueda de prensa en el despacho del Contralor, en la que aseguró que Celi fue cesado de sus funciones el viernes y mencionó el video como prueba.
“Se puede constatar la actitud de él, de mal ciudadano, y no sé cuál es su interés de seguir trabajando en esta institución”. Además, indicó que se levantó un acta, con la presencia de dos testigos, para dejar por sentada la actitud de Celi, tras su agresión a Bustos.