El funcionario de Estado afirmó que quienes actualmente cumplen las funciones en las agregadurías seguirán haciéndolo hasta que cumplan con su periodos, pero que luego se eliminarán y no se nombrarán nuevos agregados militares.
La idea habría sido una propuesta de la Secreataría de la Administración Pública.
El ministro de Defensa mantenía este viernes una reunión con los militares en servicio pasivo, para explicar la situación luego del débito de los $ 41 millones, monto pagado en exceso al Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa) por lotes donde ahora se levanta el parque Samanes de Guayaquil.
Patiño dijo que incluso entre los que protestan hay «agentes de la CIA y traidores de Angostura», porque quienes no lo hacen son militares en servicio pasivo y activo que «sienten al país y entienden que lo que recibe por el Issfa es dinero del Estado».
Patiño dijo que la devolución de los «$41 millones es algo juzgado», pero que entiende que las glosas establecidas por el tema de la venta de terrenos para el parque Samanes «es una situación apelable».