El coronel Víctor Aráuz, titular de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones Extorsión y Secuestros (Dinased), indicó que aún no termina la flagrancia y que mantienen las indagaciones, pero que tienen a dos posibles personas que podrían haber participado.
“En las primeras 24 horas, con el aval de la Fiscalía General del Estado, se realizaron siete allanamientos en varios inmuebles ubicados al sur de la ciudad, donde se comparó con información recopilada por otras unidades investigativas sobre bandas de robo a personas que operan en el sector, obteniendo datos que permitieron retener a las dos personas presuntamente involucradas”, agregó Araus.
El uniformado además reveló que se ubicó un arma de fuego que deberá ser cotejada con los indicios recuperados por los agentes policiales relacionados al crimen, para confirmar si se trata del arma homicida. Asimismo, informó que se confiscó una bicicleta de similares características a la usada para huir de la escena del crimen.
Según las versiones de testigos del hecho, se presume que el asesinato sucedió porque el joven se negó al robo de sus pertenencias. La víctima habría forcejeado con el victimario, quien realizó un disparo y abandonó el lugar a bordo de una bicicleta.
La autopsia de Medicina Legal del Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de la Zona 8, determinó que la causa de la muerte fue una hemorragia aguda interna por laceración de pulmón y corazón, por munición de arma de fuego. La bala que fue extraída se alojó en el corazón.
“Queremos poner tras las rejas a los culpables del hecho. Hemos tomado este procedimiento con todo el profesionalismo del caso, como todos los que investigamos”, expresó el uniformado.
