El objetivo de esta diligencia fue, dentro del debido proceso, obtener, conservar y preservar las evidencias de la reproducción sistemática de mensajes de varios ciudadanos, entre ellos, Agustín W. que habrían sido transmitidos desde ese medio de comunicación y que incitan a violencia y toma de armas, generando conmoción social.
Esto en el marco del asesinato de un miembro de la Policía Nacional y siete uniformados heridos, ocurrido el 14 de diciembre en el ataque al campamento minero Panantza y posterior al secuestro de dos miembros de las Fuerzas Armadas, hecho suscitado el 21 de enero. Según las autoridades, los mensajes difundidos continúan incitando a la violencia y al caos social en la provincia amazónica.
Agustín W. fue detenido el 21 de diciembre del 2016, por el delito de instigación a la discordia. Los mensajes fueron emitidos en toda la provincia y reproducidos también, a través de las redes sociales.
La Fiscalía solicitó la orden de allanamiento de las instalaciones para obtener a través de los equipos tecnológicos la evidencia del delito que se investiga. Alrededor de ochenta policías acompañaron a las autoridades de Fiscalía, con el fin de resguardar la integridad de las mismas. Al momento de retirar las evidencias, un grupo de treinta personas atacó violentamente a los uniformados con lanzas, machetes, y objetos contundentes como piedras.
Como resultado de este criminal ataque, tres policías fueron heridos y tres vehículos de la Policía Nacional sufrieron daños en su estructura. Los agentes fueron llevados hacia un hospital en Macas para que sean atendidos. Un ciudadano agresor fue detenido y se encuentra a órdenes de la Justicia.
El Gobierno Nacional, rechaza las reiteradas agresiones de estos grupos delictivos armados que no representan a la comunidad shuar o la ciudadanía de la provincia de Morona Santiago.