Este profesor de derecho y comentarista estrella de la televisión en los últimos 15 años obtuvo el 52,99% de los votos, muy por delante del independiente de izquierda Antonio Sampaio da Novoa, quien alcanzó sólo al 22,01% de los sufragios, de acuerdo a estos primeros resultados parciales.
Marisa Matias, candidata del Bloque de izquierda, formación cercana al Syriza griego y al Podemos español, dio la sorpresa al ser tercera con el 10% de los votos, por delante de la exministra socialista Maria de Belem Roseira (4,27%), y el candidato comunista Edgar Silva (3,87%).
Rebelo de Sousa, expresidente del Partido Social-demócrata (centroderecha) sucedede así a otro conservador, Aníbal Cavaco Silva, quien a sus 76 años de edad finaliza su segundo quinquenio consecutivo, o sea, el límite que permite la Constitución portuguesa.
La abstención descendió ligeramente, alcanzando a entre 48 y 53,2% según las primeras estimaciones, tras un récord de 53,5% en la anterior consulta presidencial en 2011.
Si bien el jefe de Estado portugués no tiene poder ejecutivo, dispone de una prerrogativa de peso: la disolución del Parlamento, pieza clave de una campaña con poca movilización.
Pero, según los politólogos, Rebelo de Sousa sólo tendría la intención de hacer uso de esta herramienta si hubiera una ruptura en la alianza inédita de la izquierda, surgida tras las elecciones legislativas del pasado 4 de octubre.