Las islas Darwin y Wolf, donde está el último arrecife de coral de la Reserva Marina de Galápagos y donde se concentra el mayor número de tiburones martillo en el mundo, fue el principal escenario de esta producción que forma parte de la investigación Pristine Seas (Mares Prístinos), de la que el cantante Miguel Bosé y el biólogo Enric Sala son sus impulsores. “El mundo que Darwin nunca vio” es un extraordinario trabajo documental cuya fuerza se halla en la calidad de las imágenes logradas, especialmente, bajo las aguas de las pequeñas islas Darwin y Wolf, al extremo noroccidental del archipiélago.
Hace pocos días, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), en el marco de la Tercera Conferencia Global de Patrimonios, entregó un reconocimiento a Galápagos por su esfuerzo en conservación, concretamente por la manera técnica con que se afrontan ciertos problemas de conservación, explicó el Primer Mandatario. Antes de iniciar este Gobierno, Galápagos estaba en la lista de patrimonios en riesgo, pero ahora un organismo internacional ha reconocido los esfuerzos por la conservación impulsados de forma técnica.
Entre 2000 y 2006, los tres gobiernos anteriores a Rafael Correa invirtieron en Galápagos 20 millones de dólares, una cifra 13 veces menor que los casi 270 millones invertidos en el archipiélago por la Revolución Ciudadana, entre 2007 y 2015. Galápagos tiene ahora aeropuertos, carreteras, hospital, proyectos eólicos, fotovoltaicos y hasta el sistema ECU 911, helicópteros de rescate, ambulancias, etc.
En su intervención, pidió expandir las áreas totalmente protegidas en países como Ecuador, Colombia, Panamá y Costa Rica. “Tenemos la responsabilidad de manejar de forma sostenible y coordinada estos recursos”, acotó. El ministro del Ambiente (MAE), Walter García, recordó que con este proyecto Ecuador muestra al mundo un ejemplo de conservación.
Miguel Bosé, quien ha mostrado públicamente su compromiso con este proyecto, destacó, en su corta intervención los avances sociales y tecnológicos del Ecuador. También agradeció por el legado que deja este proyecto. “Gracias Presidente”, dijo el famoso cantante español. A esto se sumó Enric Sala, quien expresó que para National Geographic es un placer estrenar aquí el documental filmado el año pasado.
El pasado 21 de marzo, la mencionada zona de aproximadamente 38 mil kilómetros cuadrados fue declarada como Santuario Marino, en un acto desarrollado en el Palacio de Carondelet y en donde se firmó el Decreto Ejecutivo 968. Se estima que el documental “El mundo que Darwin nunca vio” será visto por cerca de 500 millones de personas alrededor del mundo.