El cura fue herido en las manos y está siendo tratado en un hospital. Las heridas, según la versión oficial, no amenazan la vida del sacerdote.
Las autoridades del pueblo de Lanaken clasificaron el ataque como un intento de robo.
A través de una declaración publicada en Internet se da cuenta de que el agresor se presentó ante el sacerdote como un solicitante de asilo en Holanda, después le pidió permiso para bañarse.
Una vez que se duchó, el hombre pidió dinero y cuando el sacerdote se rehusó a dárselo, el supuesto refugiado lo atacó con un cuchillo.
El agresor huyó del lugar y la policía ha lanzado un operativo para ubicarlo que incluye perros entrenados.
La localidad de Lanaken está en la zona fronteriza de Bélgica con Holanda.