“Un intento fallido de asesinato contra el primer ministro, comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, con un dron de trampa explosiva que intentó atacar su residencia en la Zona Verde de Bagdad. El primer ministro no sufrió heridas y goza de buena salud. Las fuerzas de seguridad toman las medidas necesarias en relación con este intento fallido”, dijo el ejército de Iraq.
Al Kadhimi, pidió «calma y moderación de todos» el domingo, momentos después de que su residencia en Bagdad fuera atacada.
«Fui y sigo siendo un proyecto de redención para Irak y el pueblo de Iraq. Los misiles de la traición no desanimarán a los creyentes y sacudirán un cabello de la estabilidad y determinación de nuestras heroicas fuerzas de seguridad para preservar la seguridad de las personas, lograr la justicia y establecer la ley en vigor «, tuiteó en su cuenta oficial.
«Gracias a Dios, estoy bien y estoy entre mi gente, y pido calma y moderación de todos, por el bien de Iraq».
