“Encontramos que hay material genético en el cuerpo de la menor de siete años que lo vincula tanto en el abuso sexual, en la violación, como en la muerte de la menor”, le dijo Valdés a CNN en Español.
Valdés aseguró que los exámenes de laboratorio confirman “la relación que tuvo el señor Rafael Uribe con la muerte y el abuso sexual de la menor”.
El director de Medicina Legal añadió que como se encontró en los primeros hallazgos, la muerte de Yuliana ocurrió por asfixia por sofocación y estrangulamiento y que tenía “signos claros de violencia sexual”.
La información pasará a manos de la Fiscalía General de Colombia que procederá a evaluarla y a decidir si basados en esa información acusará a Uribe ante los jueces de la muerte de la menor, según Valdés.
La muerte violenta de Yuliana Samboní, una niña indígena de 7 años, ocurrió en un sector exclusivo de Bogotá. La niña había sido secuestrada el domingo anterior en una zona marginal de Bogotá y fue encontrada en el apartamento de Uribe, un arquitecto de 38 años que enfrenta cargos de feminicidio agravado, acceso carnal violento, tortura y secuestro simple. De ser hallado culpable enfrentaría hasta 60 años de prisión.
Después de que ocurrieron los hechos que son materia de investigación, el presunto responsable fue trasladado por su familia a dos centros médicos, uno psiquiátrico y otro cardiovascular, donde finalmente fue ingresado. Las autoridades médicas confirmaron que el hombre había consumido cocaína y opiáceos.
Uribe Noguera se declaró inocente ante un juez antes de ser enviado a prisión.
La muerte del vigilante, en investigación
El pasado viernes el caso del crimen de Yuliana dio un giro con la muerte de Fernando Merchán, el vigilante del edificio donde ocurrieron los hechos. El hombre era uno de los principales testigos de la investigación.
Este lunes Medicina Legal le dijo a CNN en Español que ninguna de las lesiones encontradas en el cuerpo de Merchán —lesiones por elemento cortante en los pies, manos y cuello— explica su muerte, por lo que se seguirán las investigaciones en torno a este caso.
El fiscal general de Colombia, Néstor Humberto Martínez, dijo que Mechán ya estaba colaborando con el ente investigador para esclarecer el crimen de la pequeña Yuliana.
Según Martínez, Merchán “había rendido ya una entrevista orientada a conocer todas las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que ocurrió el deceso de la niña indígena”.
El Fiscal agregó que el testimonio del vigilante “nos brindó muchas luces para tener un mejor conocimiento de lo acontecido en el apartamento el pasado 4 de diciembre”.
El juicio que se avecina puede durar meses, incluso años, pues el acusado no aceptó los cargos, declarándose “inocente”. Mientras el proceso penal se desarrolla, el arquitecto deberá permanecer con medida de aseguramiento de prisión preventiva.
Siete cámaras contarán lo qué ocurrió con Yuliana
El director nacional de Fiscalías, Luis González, aseguró durante una rueda de prensa que el ente investigador tiene en su poder el registro de siete cámaras ubicadas en el edificio Eqqus 66, donde fue hallada muerta Yuliana. “La escena de los hechos tiene unos testigos que son las cámaras (…) Las siete cámaras narran y muestran qué pasó minuto a minuto desde las 9 de la mañana hasta la 1 de la mañana (del día siguiente) que salió el último funcionario de la escena de los hechos”, explicó González.
Inconsistencias en el testimonio de Fernando Merchán
Este lunes, el director nacional de Fiscalías, Luis González, reveló en una rueda de prensa que el testimonio brindado por el vigilante del edificio Eqqus, Fernando Merchán, tendría “presuntas inconsistencias”. Al parecer lo que Merchán le contó a la Fiscalía no coincide con “lo que había consignado en libros (de visitas) de este edificio” y “la verdad que ha ido encontrando la Fiscalía con pruebas tangibles respecto a lo que sucedió allí este día”.
Mientras las investigaciones por la muerte de este vigilante avanzan, González confirmó que “la Fiscalía desconoce y no ha recibido ninguna información que Fernando Merchán haya sido víctima de amenazas o de cualquier otro tipo de constreñimiento”. El organismo empezó las pesquisas por esta muerte violenta desde el viernes pasado cuando ocurrió y, según el director de Fiscalías, “como toda muerte cuando es violenta debemos determinar la causa, manera e instrumento. Ahí hemos adelantado no solamente la parte criminalística forense, sino también toda una investigación para saber qué sucedió con este señor”.
Justamente, el ente investigador, a través del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) pudo determinar que los manuscritos hallados en el lugar donde murió Merchán son de él y corresponden a su letra. “Los documentos de una presunta despedida de este señor realmente corresponden a los rasgos de caligrafía que él tenía en vida”, confirmó en la rueda de prensa el general Luis Alberto Pérez, director de CTI Nacional.