Un tribunal alemán rechazó el jueves una solicitud de extradición de Puigdemont por el cargo de rebelión por su papel en la campaña independentista catalana, que podría haber dado lugar a una sentencia de cárcel de décadas en España. Ahora la justicia alemana analiza la posibilidad de extraditarlo en una causa menor por malversación de fondos públicos.
“Queremos hablar y negociar y si las dos partes no son capaces de iniciar un diálogo, sería necesaria la ayuda de otro país o una organización internacional”, dijo Puigdemont en una rueda de prensa en Berlín en referencia a la crisis entre Cataluña y el Gobierno central de España.
El exlíder catalán salió el viernes de la cárcel alemana tras la decisión de un tribunal de dejarlo en libertad bajo el pago de una fianza de 75.000 euros. Puigdemont había sido detenido el 25 de marzo en Alemania en aplicación de una orden dictada por un juez español cuando regresaba a Bélgica, donde llevaba cinco meses autoexiliado.
El exlíder catalán dijo que se quedará en Alemania hasta que acabe el procedimiento jurídico en este país o se levanten todos los cargos contra él, aunque agregó que su intención es volver a Bélgica donde tiene fijada su residencia “para continuar trabajando desde el exilio”.
“Mi deseo es volver a Bélgica, pero solo después del final del proceso aquí en Alemania, no antes”, dijo a periodistas en Berlín.