Aunque las redes sociales sean parte de la vida personal, en ocasiones lo que usted haga en ellas puede interferir con su trabajo o negocios.

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Toda la información que registremos en redes sociales puede ser usada en nuestra contra. Incluso para ingresar a otro país exigen las contraseñas de Facebook, y es posible que aunque alguien tenga en orden sus papeles, se le niegue la entrada por no proporcionar esta información. En el campo laboral la situación es similar. Para las autoridades y empresas los perfiles en internet son como una carta de presentación.

Al buscar nuevo personal, muchas empresas rastrean a sus candidatos por Google y las redes sociales. Según datos del portal Careerbuilder, el 49 % de los empleadores aseguran no haber contratado a alguien debido a lo que encontraron en las redes.

Es normal que durante la época de la universidad usted haya publicado cosas inapropiadas o políticamente incorrectas, quizás alguna foto embarazosa de un amigo en una fiesta, o una declaración desmedida contra un político o un equipo de fútbol. Lo cierto es que usted debe usar estas redes para proyectar una imagen de quien es usted.

1. Recuerde que siempre es mejor hacer que decir. Por eso es que las compañías buscan a alguien coherente con las palabras que aparecen en su hoja de vida, alguien que demuestre que su trabajo en equipo, proactividad, liderazgo y estrategia, son visibles en los demás aspectos de su vida. Usar este tipo de palabras se ha convertido en un código en las hojas de vida, no dicen mucho por sí solas, es algo que no marca la diferencia a menos de que lo demuestre.

Lo ideal es que en las redes sociales los candidatos resalten que están interesados en los temas de su campo, que están conectados con otros profesionales y organizaciones relacionadas con la industria.

2. Aunque tener un solo perfil sea más fácil de administrar, una estrategia para separar la vida personal de la profesional puede ser tener dos cuentas. Usted puede crear una personal y privada, donde solo estén amigos y personas cercanas, la otra puede ser más enfocada en su área, donde los post sean públicos para que los empleadores lo busquen. Así es más fácil comunicarse en el mismo tono con quienes lo buscan por motivos de trabajo, pues si alguien no lo conoce a usted, es posible que no entienda el contexto y mal interprete sus contenidos.

Pero si solo tiene un perfil evite tener sobrenombres. Llamarse @solorap666 puede ser muy ‘creativo’ para usted, pero también puede espantar a sus  potenciales empleadores.

3. Usted controla lo que es visible para otros, es su derecho, por eso le recomendamos que de vez en cuando revise la configuración de sus redes, busque que es lo que pueden ver solo sus contactos y que puede ver todo el mundo. Tenga en cuenta que en  muchas redes cuando hay una actualización, las nuevas publicaciones vienen con ajustes por defecto y cosas que antes eran privadas pueden volverse públicas.

4. Saque ventaja de sus perfiles. No se trata solo de poner buena cara y esconder el mugre debajo de la alfombra. Las redes sociales también son una tribuna donde usted puede mostrarse, son publicidad gratuita, deben ser vistas como una herramienta para que usted se destaque entre el montón, es recomendable usarlas para mostrar sus habilidades, intereses y experiencia.

5. Desde otros usuarios lo pueden investigar a usted  para ver cómo lo ven en Facebook, qué está público y qué no, por eso, cambie las configuraciones que sean necesarias. También escriba su nombre en Google, revise si sale algo negativo, busque qué imágenes aparecen. Si encuentra algo negativo revise si puede borrar la publicación y los tags desde sus cuentas, en casos donde los post no se puedan borrar,  cree nuevos  post que sean positivos para equilibrar las cosas.