Según el comandante federal Mike Cabana, se trata de Aaron Driver, de 24 años.
Driver estaba en la etapa final de planear un ataque que ocurriría en las próximas 72 horas en un centro urbano muy concurrido en la provincia de Ontario.
El FBI y la Guardia Montada de Canadá han estado monitoreando a Driver desde 2014 y sabían que estaba en comunicación con otros que planeaban actos terroristas incluyendo miembros de ISIS.
Sin embargo se cree que Driver actuó por su cuenta.