Desde la cocina de su casa ubicada en Los Ángeles, el doble ganador del Oscar fue el encargado de realizar el monólogo de apertura del tradicional show televisivo y contó parte de su experiencia, tras ser diagnosticado en marzo con coronavirus junto a su esposa, Rita Wilson.
«Se siente bien estar acá, aunque es un poco raro también ser el host de Saturday Night Live desde casa. Es un momento muy extraño para intentar ser divertido, pero ese es el punto del programa, así que pensamos darle una oportunidad», comenzó explicando el artista, haciendo referencia a cómo el ciclo se está llevando a cabo con todos los comediantes desde sus respectivos hogares, tras enfrentarse a una reestructuración acorde a los tiempos de pandemia.