Para el director ejecutivo de Universidad Católica, Francisco Egas, la justicia ecuatoriana esperó demasiado para investigar un tema del que ya existían indicios y que fueron denunciados en su momento por los dirigentes de su equipo, de Liga de Quito y del Manta Fútbol Club. Por esa razón, aseguró ser escéptico con el papel que pueda cumplir la justicia del país que, a su modo de ver, solo actuó cuando el escándalo estalló y ya no podía evadir el tema por más tiempo.
El dirigente deportivo dijo que resta ver qué tan estrictas serán las autoridades, aunque las recientes declaraciones del fiscal general, Galo Chiriboga, sobre un presunto lavado de activos al interior de la Federaci{on Ecuatoriana de Fútbol (FEF), es un indicio de que “alguna acusación va a haber”.
Egas insistió en que siempre fueron críticos con el manejo de la FEF, “no solo en el tema de dinero, sino también en el manejo de reglamentos, de derechos televisivos y de los congresos… Pedíamos cuentas claras sobre los gastos de la FEF y nunca se nos entregaron, eso ya no hizo suponer que no había un manejo transparente”, expresó.
Finalmente, el directivo de U. Católica cuestionó que uno de los investigados en este tema siga estando al frente del máximo organismo del fútbol en nuestro país. Aseguró que eso solo empaña más al deporte y que no se trata de culpar a alguien sino de proteger imagen del balompié ecuatoriano. “El fútbol ecuatoriano no podrá tener un cambio si nos siguen representando las mismas personas… Ecuador es el único país en el que el presidente sigue siendo uno de los investigadas por estos actos de corrupción”, sentenció Francisco Egas.
